Usualmente
viajamos, tomamos fotografías de edificios, de nosotros mismos, ¿pero no
sientes que pierden la esencia de tu viaje? Si la respuesta es sí, entonces
deberías darle un vistazo a estos tips que puedes tomar en cuenta para tu
próximo viaje.
La
hora cálida y la hora azul
Un
gran ejemplo de esto es cuando observamos un amanecer, la luz primero es
ligeramente azul y por consiguiente se vuelve cálida, con los atardeceres
ocurre lo contrario. Evita tomar fotos cuando hay exposición fuerte de sol, ya
que esto podría darle un toque “quedamo” a tu foto, lo cual haría que se perdiera la calidad.
Hay que saber sacarle ventaja a la luz, y usarla según lo que queramos.
Movimiento
Tanto
en las ciudades, como en los paisajes hay movimiento, contrasta estos
movimientos con elementos estáticos, así tu fotografía podría verse muy
versátil y comunicaría la belleza de aquel momento que estés viviendo.
Configura tu cámara para que dispare con una velocidad lenta, pero no olvides
que al bajar la velocidad, necesitas que la cámara esté en un punto estable, de
otro modo se perderá la intención (puedes usar un estabilizador).
Juega
con los reflejos
Es
muy común que en las ciudades haya edificios con grandes ventanas o incluso en
paisajes naturales si hay agua, podemos notar el reflejo de nosotros mismos,
del cielo, de las hojas cuando caen; puedes aprovechar de esto para
distorsionar el paisaje o ciudad, e incluso crear una abstracción.
Cambia
de perspectiva
No
siempre utilices la cámara de forma horizontal o vertical en un plano medio, ya
que se vuelve aburrido y serían las típicas fotos que todo turista toma.
Arriésgate a ver la ciudad o paisaje con otros ojos, puedes utilizar ángulos
picados, contrapicados, que es hacer que la cámara mire hacia arriba o hacia
abajo, pero antes, planea donde podría verse interesante.
No
olvides que estás contando una historia, que es tu viaje. Atrévete a intentarlo
y verás que tus fotografías serán elogiadas por tus amigos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario